martes, octubre 15

Ernesto Miranda Rivas

 A treinta y cinco años de su muerte (17 de Octubre de 1978)

Algo más que un Obitaurio

Quizás el signo más recurrente -como imagen- que empleaba el anarquista Ernesto Miranda, entre sus camaradas, era la figura del equino, el de la poesia Homérica. Imaginaba la nueva sociedad en nuevos sustentos económicos, donde el trabajo era reivindicado con respecto al capital. Anhelaba que los trabajadores organizados participaran e intervinieran en la elaboración de los planes de desarrollo socio-económico, con acceso a la dirección administrativa y ejecución. Debe-decía- el trabajador comprender todos los pasos elementales de cada tarea y de cada etapa del proceso productivo y por lo tanto debe conocer la riqueza que él genera, para así disfrutar de esa ganancia, supeditado al beneficio colectivo y al bienestar del país. Por ello repudiaba por igual a los sistemas económicos estatales o privados, por considerarlos explotadores y oprobiosos al hombre. Pero estaba convencido que la novísima economía debía ser estructurada “ayer”y no diferida cuando las condiciones objetivas lo permitan.

-Hay demasiada hambre y miseria entre los compañeros en este momento. Si esperamos nos morimos...-señalaba.

Cuando algún estudiante o jóven obrero le preguntaba si los detentores del Poder iban a permitir tal paso, precipitadamente interrumpía. -Compañero. Utilizaremos la “Operación caballo de Troya”.Y en el acto narraba ese pasaje de “La Odisea” donde el General griego Odiseo (Ulises) -luego de diez años de asedio infructuoso a Troya, opulenta fortaleza que resguardaba el paso de Europa y Asia- en gesto de paz les envió a los sitiados un colosal caballo de madera. Lo mandó a dejar en el campo, de modo que los troyanos al verlo, lo consideraron una ofrenda a los dioses y lo introdujeron en la amurrallada cuidad. Pero jamás imaginaron que en el vientre del corcel, venía Ulises y un grupo de selectos guerreros, quienes en pocas horas vencieron en su propia cuidadela a las confiadas tropas de Troya. Esta acción según el zapatero Miranda, mostraba que con astucia e ingenio era posible levantar una estrategia -desde la entraña del caballo- y elaborar una táctica segura de atenuar a los régimenes expoliadores del hombre por el hombre, desde su punto más débil: el económico. Con esta analogía, evocaba a Aquiles, otro personaje de Homero, quien pese a ser hijo de dioses, era vulnerable cual mortal como quedó patentizado cuando una flecha se clavó en uno de sus talones, causandole la muerte.

Con vehemencia y sólidos argumentos -que trazaba en papeles de cuadernos- Ernesto nos daba reflexiones, informaciones y referencias sobre como en ciertos lugares del planeta, el rocinante se posaba. Lamentaba que el proyecto Mutualista de Proudhon y su consiguente Banco de los pobres, “matriz de la economía de los asalariados”, haya quedado marginado de los acuerdos de la Primera Internacional de Trabajadores. Inculpaba de ello, a la visión capitalista de Estado, proveniente de la escuela económica y política sajona, y que después pasó a primar entre los partidos obreros del orbe.
No obstante, la Comuna de París -nos manifestaba- de efímera existencia se rigió por los principios económicos Proudhianos.

-Por suerte esta concepción Mutualista fue recogida y perfeccionada por el Cooperativismo obrero- se reconfortaba. Porque entendia que solo con Libertad y Bienestar social, sus hermanos de clase iban a lograr la liberación. Entabla entonces contacto con el médico norteamericano, James Peter Warbasse, el gran apóstol del Cooperativismo y militante de la IWW, quién epístolarmente lo forma. Paralelamente resolvió a contar de 1949 hacer un seguimiento de las experiencias de cooperación o Autogestión económica existentes.

-Estas formas Asociativas son exitosas e inteligentes conquistas del sindicalismo, en ejecutar la “Operación Caballo de Troya”-nos expresaba años después.

Investido de fundador y secretario general de la Federacion Obrera del Cuero y del Calzado (FONACC), conoció el proceso cooperativista israelí, basados en los Kibutz, Moshav y la Central Sindical “Histradut”. Aprovechando una Conferencia Internacional visitó Yugoslavia para observar la incipiente Autogestión obrera. Allí se encontró con Warbasse quién le presentó a Edward Kardelj, fiero guerrillero Partisano antinazista y creador de la Autogestión yugoslava, con quien en las décadas posteriores se encontraran asiduamente en Congresos Internacionales, como cuando ambos en 1964 recorrieron Argelia para ver la implementación del Cooperativismo. El propio Ernesto Miranda fue anfitrión, en compañía del entonces rector de la Universidad Católica, Fernando Castillo Velasco, de los Seminarios de Autogestión Económica que dictó Kardelj en ese plantel.

Luego recorrió los países escandinavos para interiorizarse del Cooperativismo habitacional y de los supermercados populares. Visitó Bolivia, tras la revolución de 1952, para ayudar a la creación del área Autogestionaria y luego México donde se aboca a estudiar los Ejidos y las Cajas Populares, donde participó en su Asamblea Constituyente de la Federación de Cajas (1953). Es tal la experiencia que adquiere en los temas económico-políticos, que al constituirse en Chile la Central Unica de Trabajadores (CUT) -en 1953- el único grupo que tenía un novedoso plan económico social de corte Autogestionario -en oposición radical a las demás fuerzas politícas de tinte estatistas- eran los anarcosindicalistas encabezados por Ernesto Miranda.

Por esa época, formó un inédito organismo Mutualista -completamente fuera del Estado- dentro del sindicalismo, pero en particular en su gremio: El Fondo de Compensación del Cuero y del Calzado. Utilizando recursos financieros de los industriales del cuero y de los afiliados de la FONACC, pone a disposición de sus socios sindicales un vasto y complejo paquete de regalias sociales, expresados en Centros de hotelerias y recreacionales, clínicas médicas y dentales, que además proporcionaban créditos sociales, bonos estudiantiles, ayudas en servicios mortuorios, etc.

A pesar de ser excluído - por conflictos sectarios entre facciones partidistas de la CUT y del MIR- no ceja de organizar cooperativas. En 1968, ya autodisuelto el Movimiento 7 de Julio, Miranda y sus compañeros, bajo la consigna “Crear uno, dos, tres Caballos de Troya” (En alusión al grito “Crear, uno, dos, tres Vietnam, del Che Guevara), se integran al Cooperativismo chileno, logrando en los años siguentes que muchos de ellos, desempeñaran roles importantes en su seno. Una de estas conquistas fue formar durante el gobierno de Allende, la Federación de Brigadas de Trabajo y Solidaridad y Empresas de Trabajadores, que aglutinaba a obreros y empleados asociativos.

En los setenta, Bolivia y Perú, que por aquel entonces buscaban la transformación de la sociedad en torno a la Economía Solidaria, fue su nuevo destino. En Lima cooperó en el Comité de Asesoramiento a la Presidencia (COAP) en la confección del anteproyecto de la Ley de Industria. Tales desvelos fueron concretados por el Gobierno Militar Revolucionario, al instaurar la Autogestión bajo la figura de “Comunidad Industrial”. En cambio, Miranda se aleja dolorosamente de Linden F. Burnham, fundador de la Unión Sindical de Guyana Británica y padre de la independencia de ese país. Si bien se habían conocido en citas internacionales del sindicalismo, los unía sus coincidencias sobreCooperativismo. Por ello, ante la proclamación de la nueva República Cooperativista de Guyana, por parte de Burnham ya pedido de él, Ernesto se puso a su disposición. Desafortunadamente la influencia del Castrismo cubano no hizo posible estructurar el socialismo cooperativo, repercutiendo en la ruptura de sus amistad.

Entusiasmado por el papel que estaba tomando el Cooperativismo en América Latina, se sumó esperanzado a la formación de la “Confederación Latinoaméricana de Cooperativas del Trabajo y Mutuales (Colacot) en junio de 1975 (Caracas), donde alcanzó un cargo en el buró ejecutivo. Esto le permitió en noviembre de 1976 -con motivo de la promulgación de la trascendental Ley del Trabajo Asociado (único en su género) - asistir como invitado especial a Belgrado (Yugoslavia). En la ocasión, Edward Kardelj, le solicitó que prolongara su estadía para que apreciara el desarrollo presente del proceso Autogestionario. Al regresar, noventa días después, seleccionó a un grupo de personas, entre cooperativistas y anarcosindicalistas para que le ayudaran a vertebrar un “Circulo de Estudios y Análisis de la Economía Cooperativista Mundial”, que perduró hasta 1989 como los “Ergocráticos”.

En 1978, el zapatero rechazó el ofrecimiento que le cursó una Universidad de Costa Rica, para que asumiera como coordinador del programa de Educación Cooperativista, debido a que le era más prioritario auxiliar en Chile, la defensa de los DDHH y restauración del sindicalismo, a través del CODEHS, presidido por su viejo amigo, Clotario Blest.

Para su cumpleaños, en pleno festejo en su casa de calle Sergio Ceppi (La Cisterna), Ernesto Miranda nos mostró a los invitados, varios croquis a lápiz e infinidad de hojas escritas a máquina, anunciando que pronto empezará a ordenar el material, a base de apuntes sindicales, reflexiones anarquistas, estudios económicos y autogestionarios, y rememoranzas de viajes, para concluírlo en un libro. -Se llamará “Caballito de Troya y Odiseo, el sindicalista” -sentenció, pidiéndome a la vez que lo ayude en su elaboración, a contar de Noviembre.

El 17 de octubre de ese año, producto de un efisema pulmonar, Ernesto murió.

Durante el velorio de Miranda, si bien es cierto que la tribu anarquista apareció completa, no por ello desaparecieron el desdén contra el fallecido. Para los Anarquistas específicos, sus detractores severos, resultaba insoportable esa obsesión de Ernesto Miranda por rescatar o impulsar proyectos de Economía de Trabajo Asociado, en estructuras capitalistas o comunistas estatales. -Era un neoanarquista reformista- coincidieron.

Al conmemorarse 35 años de su fallecimiento, lamentablemente aún subsisten entre las filas de los socialistas libertarios, las posiciones de los antiguos específicos, fundamentados en sólo protestas ruidosas y algunas veces...explosivas. El anarquismo será real amenaza a la Autoridad (no importa el color) y a la Propiedad, cuando solo sea capaz de tener propuesta en el ejercicio productivo y su ciclo.

En esta conmemoración, urge revisar y conocer su legado revolucionario, cotejarlo y evaluarlo con las otras corrientes anarquistas imperantes y determinar si el anarquismo será constructor de una nueva sociedad o sólo una rebeldía generacional.

Oscar Ortiz, historiador.



domingo, octubre 13

“Chile es un país brutalmente enfermo”

fuente: http://radio.uchile.cl/2013/09/24/chile-es-un-pais-brutalmente-enfermo

La consulta del doctor Paz está en el límite histórico entre el barrio alto y el bajo pueblo: La Plaza Italia. Para iniciar esta conversación, subimos a su consulta en un quinto piso al comienzo de calle Vicuña Mackenna, y lo primero que dice, al preguntarle por la salud mental de los chilenos, es que no quiere hacer “atribuciones causales”, que prefiere comenzar por los hechos, dando inicio a una larga lista de problemas que pesan sobre la población de nuestro país:
“Uno: Chile es el país que tiene la tasa de depresión más alta del mundo. En la última Encuesta Nacional de Salud se logró establecer que 2 de cada 10 chilenos presentaban síntomas depresivos como para provocar algún grado de incapacidad funcional. Si uno compara eso con la estadística internacional, el promedio en estudios similares, hay 4 veces más prevalencia de síntomas depresivos en la población de chilenos adultos que en el resto de la población mundial.
“Dos: En todos los países de la OCDE el suicidio en niños y adolescentes, o se mantiene estable o va en disminución. Chile y Corea del Sur son los únicos países donde el suicidio en niños y adolescentes va en aumento.
“Tres: En la última encuesta de violencia aplicada por Adimark, 3 de cada 4 niños chilenos, declara que en su casa hay situaciones de violencia física y/o psicológica, y 1 de cada 10 niños chilenos reporta que ha sido víctima de abuso sexual.
“Cuatro: Chile es el país del mundo donde el consumo de alcohol de y/o marihuana se inicia más precozmente. El promedio de inicio de consumo de alcohol y marihuana y/o nicotina es a los 12 años, en circunstancias que en el mundo es entre los 14 y 15 años. De hecho las tasa de adicción en niños y adolescentes son de las más altas del mundo”.
“Cinco: Cerca del 40 por ciento de la población de adolescentes consumen alcohol en forma perniciosa para la salud. Cerca del 5% de la población de niños y adolescentes consume pasta base de forma adictiva y más menos el 10% de la población consume marihuana en forma perniciosa para la salud”.
“También tenemos las tasas más altas del mundo en conductas de bullying, de maltrato de niños por otros niños, para qué hablar de las tasas de delincuencia infanto-juvenil. Somos el país con la mayor tasa de internación en cárceles del mundo. La tasa de institucionalización en hogares del Sename, por situaciones de violencia intrafamiliar y otras, también es de las más altas del mundo. En Chile, las dos causas principales de muerte entre jóvenes y adolescentes, es muerte violenta, ya sea por suicidio o por homicidio. Uno de cada 3 santiaguinos se declara altamente estresado. En fin tenemos una serie de indicadores que muestran que estamos atravesando por una gravísima crisis de salud mental inédita en occidente.”.
-¿Qué pasó con los ciudadanos de este país para tener este escenario?
“Uno puede visualizar varias causas: Chile tenía cierta forma de trabajar, una cierta forma de funcionar y con el golpe militar se instala esto que se ha llamado modelo neoliberal, que cambia totalmente esta forma de vida. ¿Y en qué consiste este modelo? Básicamente en dos o tres cosas: primero, el Estado es subsidiario, lo que significa que las iniciativas en Salud, Vivienda, Educación, previsión social son entregadas a particulares y el Estado sólo interfiere cuando los particulares no pueden resolver estos problemas. ¿Qué significa en la práctica?, que cada chileno tiene que arreglárselas por su cuenta y eso ha generado un sentimiento de desconfianza, de inseguridad, de desprotección total. La gente siente que ya no hay nada, ni nadie, que lo pueda proteger. Si eso se conecta con otro fenómeno propio del neoliberalismo, que es la individualización, entonces, ya no hay sindicatos, no hay colegios profesionales, no hay federaciones estudiantiles -sólo en el último tiempo han asumido mayor vitalidad- pero claramente, tenemos un tejido social pobre. Todas las iglesias están debilitadas, los sindicatos, las juntas de vecinos, la gente comienza a replegarse en sus casas.
“El sistema neoliberal además, ha puesto la exigencia que las mujeres entren masivamente al mundo laboral y tienen que dejar a sus hijos precozmente en salas cunas y todos sabemos que los niños, los primeros seis meses o el primer año de vida no tiene que estar en salas cunas, tienen que estar con su madre, pero el modelo neoliberal exige que la madre salga a trabajar porque con el sueldo de uno de los progenitores no basta. Entonces, tenemos progenitores cansados, obligados a dejar a sus hijos precozmente, a destetarlos. Tenemos niños más estresados. Tenemos mala educación. Los colegios, salvo los que pueden pagar, son de muy mala calidad, se van segregando por nivel social, entonces, los colegios donde hay menos plata, es donde hay más estrés y hay mayor violencia. De hecho hay indicadores claros que dicen que la tasa de angustia y depresión es de más o menos un 7% anual en las personas de Lo Barnechea, Vitacura y Las Condes, pero es de un 40% anual en los sectores de bajos ingresos, o sea, claramente, la angustia y la depresión en Chile se distribuyen según nivel socioeconómico. Agréguele a eso que tenemos un sistema previsional absolutamente reventado, con un sistema de salud que está quebrado, donde se crea un sistema Auge que en la práctica significa que si usted se fractura una cadera a los 70 años va a tener que esperar un año con suerte para que la operen. Entonces: Desprotección, trabajo precario, campea el poder de los empresarios, de los poderosos, con bajo nivel de sindicalización, con leyes laborales que protegen poco a los trabajadores, con inspecciones del trabajo que muchas veces favorecen más al empleador que a los trabajadores”.
-¿Quiénes acuden a su consulta?
“Trabajadores del Transantiago, trabajadores del comercio, cajeras de supermercado, vendedores de call center, profesores sobreexplotados que tienen que trabajar a triple jornada para hacer las “lucas”, y al otro lado: ejecutivos de bancos y de empresas transnacionales, porque la lógica del neoliberalismo es la sobreexplotación del trabajador que incluye también al ejecutivo, entonces, tenemos estrés al por mayor”.
-¿Cuánta responsabilidad tiene en la salud mental de la población, la impunidad en la que ha vivido la sociedad chilena en los últimos 40 años?
“Afecta, y no sólo la impunidad de los crímenes cometidos hace 40 años atrás, hay que pensar que hoy 15 mil niños están secuestrados por el Poder Judicial, y las familias que hay detrás de esos niños, que no tienen plata para pagar un buen abogado. Porque, ¿quiénes son los que van a las cárceles?, los pobres. ¿Quiénes son los niños que terminan en el Sename?, los niños pobres. Además, tenemos un Poder Judicial que está en crisis. Carpetas que se acumulan en la fiscalía. Los fiscales de abusos sexuales no dan abastos. O sea, un Poder Judicial que no está al servicio de la gente. Claro, en aquellos sectores que sufrieron más directamente la represión de la dictadura, por cierto que ahí también se acumula mayor fragilidad y patologías.
Otro sector muy afectado en su salud mental y emocional, es el pueblo mapuche. Estamos comenzando a trabajar con comunidades de niños y adolescentes en la zona mapuche, en Ercilla precisamente, y la impresión que tenemos es que hay un nivel de angustia, de temor, de desesperanza en algunos casos, brutal. No sólo en los niños, en mujeres, en hombres. Niños que ven como entra Carabineros a las 12 de la noche, les descerraja la puerta, sacos de harina que se rompen en allanamientos que se hacen dos o tres veces al mes.
“Hoy tenemos no sólo el impacto a los derechos humanos de hace 40 años atrás. Hay territorios en Chile donde la violación a los derechos humanos continúa de manera subrepticia, o a veces más directa, como en la zona mapuche”.
LA ANOMIA “UN PAÍS DE ZOMBIES”
-¿Pero qué pasa con una sociedad que ve que quienes cometieron violaciones atroces a los derechos humanos, tienen penas menores o bien, andan sueltos y se los puede topar en cualquier esquina? Que no ha habido justicia.
“No hay justicia para los poderosos, porque para el pobre la justicia le cae con brutalidad. Todo eso va generando un fenómeno que se llama anomia, que es la pérdida de la confianza en que existe un colectivo”.
“Los seres humanos somos animales sociales, somos primates sociales, somos colectivo. Nuestra identidad se forma en la interacción con los otros. Entonces, ¿qué pasa cuando se disuelven los vínculos sociales y se pierde la confianza en que el colectivo es portador de una norma, de un sentido, de una cultura? Surgen estas tribus urbanas, surgen las sectas, los movimientos religiosos fundamentalistas, porque el ser humano necesita del colectivo. Se produce este fenómeno de aislamiento, de insensibilización donde al final vamos transformándonos en un país de zombies, que viven en la rutina. Se produce una anomia, una pérdida de la conexión con la moral, lo social, lo valórico. Entonces, hoy día pasan cosas aberrantes en Chile y la gente sigue su camino como un verdadero zombie, y el que logra conectarse con la realidad se deprime y se angustia. Tenemos un país dividido entre los anómicos, insensibilizados, zombificados y los que logran conectarse con esta situación”.
-¿El diagnóstico es que este es un país que está enfermo?
“Este es un país brutalmente enfermo, es cosa de ver cómo manejamos, cómo nos vinculamos, la pérdida de cordialidad. Es un país neurótico”.
-En el caso de un paciente, existen terapias y medicamente, ¿qué se hace cuando es un país el enfermo?
“A un paciente, le damos fármacos para que el cerebro comience a funcionar mejor, se adapte. Psicoterapia, para que la persona vuelva a recuperar un nivel que le permita funcionar, pero claramente estamos colocando parches. Si queremos salir de esta crisis de salud mental, el país tiene que cambiar. Tenemos que volver a pensar, a imaginar un país decente, un país vivible. Porque podemos generar ejércitos de psiquiatras, psicólogos, consultores de salud mental, pero siempre vamos a quedar al debe, porque lo que está generando esta oleada de enfermedades, inestabilidad emocional y estrés, es el modelo y hay que hay que cambiarlo, pero para poder cambiarlo se necesitan ciudadanos movilizados y conscientes. El problema es que el modelo genera anomia y zombificación social. No es fácil. En la medida que el modelo va enfermando más a la gente, la gente se va haciendo menos sensible. Por eso el trabajo de recuperar la ciudadanía, la esperanza, es un trabajo urgente”.
-¿El proceso electoral que hoy vivimos, en el cual se inscribieron nueve candidaturas a la presidencia, habla de un despertar o de todo lo contrario?
“Yo creo que habla justamente de los contrario, de la anomia, porque resulta que no hay sentido colectivo. La gente es incapaz de generar alianzas. Creo que si hubiera más facilidades para inscribir candidaturas habría 17 millones de candidatos, porque cada grupúsculo desconfía del otro y genera identidades parciales, es un fenómeno de sectarización de la política porque hay desconfianza. Entonces, está la izquierda más uno, más dos o más tres. Ni la derecha logra ponerse de acuerdo, porque no hay redes, no hay vínculos, no hay capacidad para generar alianzas y eso también tiene que ver con el impacto que tiene el modelo neoliberal. Porque ¿cuál es el mensaje?: arréglatelas solo, emprende solo, porque esta es una jungla y el que no se las arregla solo, estásonado”.